EN PRIMAVERA MUCHO CARIÑO: FRESAS con wasabi, con gambas, con chocolate....

Lo único que no me gusta de las fresas es su etimología..
debía ser más bonita, pero desencanta.  
Estamos en primavera y aún no había preparado nada con  fresas de Huelva.  Son el símbolo del cariño, además de alejar la envidia y los celos. Hoy quería homenajear ese cariño que nos rodea a todos, que damos y nos dan, pero para no ser muy cursi, me salté las normas un poco. 

El menú para un domingo de amor: 

1. Zumo de fresas con wasabi
2. Carpaccio de gamba blanca 
3. Carpaccio de calabacín
4.  Ensalada de fresas con vinagreta de chocolate. 

1. El zumo me lo inventé y está muy bueno.  Fresas, zumo de una naranja y un poco de wasabi con un toque de sal y azúcar morena. ¿Por qué con wasabi? Porque hay amores que matan...NOOO, porque quería algo contundente y un poco picante para acompañar el carpaccio de gambas. 

 









El carpaccio de gamba blanca es una delicatessen, la verdad. Es mejor prepararlo para poca gente.....para dos y chutando, que si no, se convierte en un trabajo muy pesado. Debemos pillar una gamba fresca y pelarla y ponerla en el congelador un par de horas. Una vez casi congeladas, las partimos en dos y le sacamos lo negro. Debe quedar limpita, limpita. A continuación, se va descongelando en el mismo plato y en nada de tiempo. Mientras haces un plato, ya está el otro listo. Entonces las rociamos con el zumo de una lima o dos y después aliñamos con sal, en cristal mejor, con aceite y lascas de parmesano. El toque del plato es el eneldo fresco. Sí, todo fresco para este palto. Es todo un señor:  


Poquito eneldo, que se come el sabor de la gamba.  Y las lascas de parmesano son mal cortar el trozo de queso básicamente. Que se rompa..nada de rallarlo...que no vale...¿eh?

Está superrefrescante, buenísmo y acompañado por el zumo de wasabi con fresas..me ha parecido lo más ya...

3. El carpaccio de calabacín está también muy bueno:
Ingredientes: rodajss superfinas de calabacín sin pelar, piñones, limón,
aceite y parmesano. 
 Aprovechando el parmesano y que son platos muy ligeros, mejor dos para que sea más original la mesa..¿no? El de atún rojo os lo preparo otro día.
Hay que tostar los piñones y una vez rociados en el calabacín, éste con limón y al frigorífico unos 30 minutos. Después le añadiremos su sal, aceite y parmesano.




4. La ensalada de fresas también es muy fácil. 

Pero quise darle un toque a postre por ser el último plato. La quería con mucha energía, mucho sabor y color y que tuviese un toque juguetón. Eso se lo da el chocolate. 
La vinagreta de chocolate la inventé sobre la marcha. No podia ser tan difícil: aceite, sal, xirope de chocolate y vinagre balsámico en crema, para que la textura no se me rompa:  

 La energía la ponen los frutos secos...me ha sorprendido mucho el sabor del anacardo con el chocolate y la fresa:  GUAU!!!!  Las hojas se pueden comprar de bolsa: cualeuir mezclum, pero que lleve espinacas baby....cuyo sabor combina mejor.

La regamos con la vinagreta de chocolate y con mucho amorrrrrr: 

Se siente uno verdaderamente querido con esta ensalada..creédme!!!!


No olvidéis que el zumo va con el carpaccio de gamba.  Lo otro es un vinito, que también casa bien y más si la uva es Malbec, propia de Argentina:
escandaloso caldo.
 Qué alegría de menú!!!!!! Sí, lo sé, es para quererme. Con este menú os llueven los arrumacos seguro, seguro. En realidad es un menú muy de San Valentín...pero bueno, las fechas no marcan mis apetitos.....
Si estuviéramos en Papua Nueva Guinea y enamorados, tendríamos un verbo para expresar dar de  comer en la boca: yanku-peku.